Alicia Ryzewski. TiempoMotor.com especial para AutoData
A poco de concluir 2010, el sector automotor se encamina a cerrar con un nuevo récord en las principales variables, superando el 2008. Pero mientras algunas dudas se despejan, de cara a 2011 el escenario pre-electoral en marcha y la suma de varios factores lleva a que el sentimiento de incertidumbre no pierda protagonismo en la agenda sectorial.
Al momento, el último informe de la Asociación de Fábricas de Automotores (ADEFA) arroja que la producción llegó a 437.149 unidades, superando en 50,1% el registro de igual período de 2009; mientras que las exportaciones suman 267.058 unidades, 52,4% más que enero-agosto del año anterior. En ventas, la Asociación de Concesionarios (ACARA) indica que se patentaron 450.431 0 KM lo que hace prever que 2010 quedará como un año histórico con 620.000 registros.
Los datos de producción y exportación, “ponen de manifiesto el esfuerzo de las terminales para incrementar la producción a fin de satisfacer la demanda interna y los requerimientos del mercado externo”, dijo César Luis Ramírez Rojas, presidente de ADEFA quién en función de los registros obtenidos al momento, consideró que 2010 se puede cerrar con una producción de 700.000 unidades y exportaciones por 400 mil.
Para 2011, la expectativa de la consultora Abeceb.com que dirige el economista Dante Sica, está en que se vuelvan a expandir las variables de la mano de la demanda local e internacional principalmente de Brasil. Así, la producción podría ubicarse en 790.000 unidades gracias a la tracción de la demanda externa que rondaría las 540.000 unidades – 68% de la fabricación total. Por el lado de ventas, la estimación de Dante Álvarez, presidente de ACARA, es de 680.000/690.000 ya que se aguarda un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) (4,3% en Presupuesto Nacional 2011).
“Por ahora prevemos niveles de producción y exportaciones semejantes a los que alcanzaremos en 2010”, señaló Cristiano Rattazzi, presidente de Fiat Argentina, estimación compartida por Sergio Rocha, presidente de GM Argentina quien aseguró que la industria va a continuar por ese camino de crecimiento, “seguramente un poco más moderada, a un ritmo de 5%, pero va a crecer en toda la región”.
ESCENARIO Y TEMAS DE AGENDA
A la hora de las estimaciones 2011 emergen varios temas que llevan a potenciar la cautela entre los empresarios aunque hay factores como el incremento de la cosecha y el precio de los commodities que se ubican como un bálsamo ante el movimiento de las aguas. Movimiento impulsado por la inflación, licencias de importación y falta de visibilidad de mediano y largo plazo – en parte potenciada por el proceso electoral de octubre del año próximo- que dejan al descubierto ciertas preocupaciones. Sin dejar de mencionar, las negociaciones salariales, la intervención del Gobierno, el proyecto de incluir a los trabajadores en las ganancias de las empresas presentado por el diputado oficialista Héctor Recalde, y cuestiones como la provisión de energía, entre otros.
Es este sentido, por ser un año electoral jugará con mayor intensidad el factor incertidumbre. “Aún en un contexto esperable de expansión del consumo de bienes, será más dinámico el primer semestre que el segundo. El acercamiento a la fecha de elecciones probablemente genere incertidumbre y desacelere el crecimiento”, dijo el economista.
Con esta particularidad, en ACARA estudiaron una base histórica para determinar el comportamiento de la demanda en años electorales y Álvarez señaló que “todo indica que el mercado no se ameseta así que deberíamos estar en 680/690.000 unidades aunque si puede que surgir incertidumbre” dependiendo del curso que tome la campaña.
Independientemente de esto, el tema que más preocupa sin duda es el de la inflación. Para 2010, Abeceb.com estimó que se ubicará en torno a 23,6% y el tipo de cambio a diciembre en 4,09 $/U$D, mientras que en 2011 la inflación rondaría el 22,1% y el tipo de cambio en $4,15. Este fenómeno superior a 20% con variación leve del tipo de cambio genera un escenario de inflación en dólares que impacta en la competitividad en forma negativa teniendo en cuenta la inserción internacional de la industria argentina, y sobre todo en la pulseada con Brasil y México por atraer nuevas inversiones.
En esta pulseada hay proyectos confirmados. Con una demora de casi dos años, finalmente Honda pondría en marcha la primera planta de producción de autos en Argentina con una inversión inicial de $400 millones para producir en City. Por su parte, Ford ya confirmó un desembolso de $1.000 millones para los próximos tres años para fabricar la nueva plataforma global de la pick-up Ranger, mientras que PSA Peugeot Citroën inyectará de $1.000 millones la planta de El Palomar para nuevos proyectos.
De momento se guardan los anuncios de nuevas inversiones por parte de General Motors, Fiat, y Mercedes-Benz, mientras que Volkswagen está en pleno proceso de concluir un tercio del plan de $1.700 millones para la pick up Amarok y Renault transita el último paso del plan de $500 millones anunciado en 2009 para la producción del Fluence. En todos los casos, los argumentos apuntan a que se está trabajando para captar nuevos proyectos de cara a 2012.
Pero si bien captar nuevas asignaciones ubica a Brasil como el principal competidor, desde que se desató la crisis internacional a fines de 2008, todo se calmó gracias a la demanda del país vecino que en este 2010 potenció su participación concentrando en un 86% los despachos argentinos.
Y no hay previsiones de que eso cambie en 2011. “La evolución de su economía (por Brasil) y el tipo de cambio es fundamental para el éxito de la industria argentina”, destacó Enrique Alemañy, titular de Ford Argentina, mientras que Sica agregó que “también seguirá la recuperación de la demanda del resto de América Latina que en este año, destinos como Perú, Chile, México o Paraguay, mostraron fuerte crecimiento respecto de 2009, aunque no en niveles 2008”. En tanto, la re-inserción en Europa tardará más y estará ligada no sólo a la demanda sino también a las posibilidades de los modelos lanzados recientemente o próximos a hacerlo.
Con todo ello, y luego de superar 2009 con un impacto de la crisis menor al esperado, el 2010 presentó permanentes desafíos como el afianzamiento de los niveles de competitividad de toda la cadena de valor y aún así se ubicará como el mejor de la historia. El 2011 – con varias nubes en el horizonte- promete no presentar mayores escollos, si permanentes sobresaltos pero la gran incógnita atada al resultado electoral está centrada en el desempeño de 2012.
Los vehículos que se producen en la Argentina cuentan con una baja integración de piezas nacionales. Según la Asociación de Fábricas de Componentes (AFAC), se estima que este año (con producción récord) se llegará a u$s7.200 millones de déficit comercial.
Para 2011 se observan algunas cuestiones que van a funcionar como restricciones al crecimiento de la industria automotriz o al menos tienen el potencial de hacerlo. “En principio, y si bien parecen evidenciarse avances, el problema de la real capacidad del sector autopartista para proveer partes y piezas para una industria que crecería más del 12% aún no está garantizada en algunos rubros”, explicó Sica y es un tema clave que ya genera preocupación en el Gobierno, por el impacto negativo que tiene a través del incremento del déficit comercial de autopartes.
Si bien se trabajó entre sector público y sector privado sobre estas cuestiones en los últimos meses, se requiere de mucho tiempo para revertir la situación. Las medidas aplicadas por el Gobierno son alentadoras pero insuficientes. Así, las voces del sector lamentan que en la Argentina no exista un BNDS con operatorias normales para la realización de inversiones y se siga intentando paliar el problema con el Fondo del Bicentenario o dinero del Fondo de pensiones ANSES.
El tema de la presión inflacionaria no es menor tampoco para este eslabón de la cadena de valor.. “La suba de costos en dólares reduce los márgenes ante la fuerte competencia del exterior, se incrementan los niveles de stress comercial con los clientes y enrarece el clima laboral en general lo que afecta las decisiones de inversión”, explicaron desde AFAC. Con este escenario, los puntos más críticos del escenario 2011 están centrados en la suba de costos, la presión impositiva (incluyendo el pago en tiempo y forma de los reintegros a las exportaciones y el reembolso de IVA), sin dejar de lado la situación gremial.
Para AFAC, el 2011 se perfila como un buen año desde lo productivo, con chances de alcanzar un nuevo récord de producción de vehículos, impulsada fuertemente por la exportación a la región. No obstante, la contratara es que, en lo que respecta a la balanza de autopartes, continuará un importante desbalance comercial. Sin dudas, ante este escenario es imperioso un nuevo esquema institucional que aporte una mirada integral y de largo plazo, en el que la nueva agenda de temas involucre activamente y conjuntamente al ámbito privado (terminales, autopartistas y proveedores de insumos) y al Estado.