Google dió a conocer en Estados Unidos un concept car denominado “Google Self-Driving Car”, diseñado por ellos mismos con el objetivo de mejorar la seguridad vial. La novedad de este prototipo es que conduce de forma autónoma, ya que el conductor o mejor dicho quien ocupa ese lugar en el vehículo, no dispone de volante ni pedales.
Google hace tiempo coqueteaba con la idea de desarrollar tecnología para vehículos autónomos. Previamente a este logro obtuvo una patente para la tranformación de un vehículo de serie al modo autónomo, habiendo utilizado para las pruebas al Audi TT y al Toyota Prius.
Como un verdadero conductor, el prototipo biplaza se basa en un sistema de software que incluye google Maps, sensores con radares incorporados y un sistema de láser para controlar la marcha. La dotación de confort es inexistente, sólo cuenta con una pantalla que detalla puntualmente la ruta y un botón de “start and stop”.
Los vehículos tendrán propulsión eléctrica y por razones de seguridad se limitarán a 40 km/H. Los primeros lotes, del total de los 100 que se construirán, se venderán con controles manuales para utilizar en caso de desperfectos.
Chris Urmson, director del proyecto declaró: “Estamos muy emocionados. Esto nos permitirá ir hacia adelante en la tecnología de conducción automática y entender las limitaciones”.