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GM LO TRAERA A LA ARGENTINA

EL CHEVROLET AVEO EN FASE DE ESTUDIO

A 14 meses de haber iniciado la construcción del complejo productivo en el estado de San Luis Potosí, México, -donde se desembolsaron más u$s1.000 millones- General Motors arrancó formalmente con la operación de la planta. Y no es un paso industrial menor, es que de allí saldrá el Chevrolet Aveo, un sedan con fuerte potencial para arribar a la Argentina y potenciar la oferta de la marca del moño dorado a nivel local.

Con la presencia del presidente de México, Felipe Calderón; el gobernador del estado, Marcelo de los Santos; el presidente de General Motors Norteamérica, Troy Clarke; Kevin Williams, presidente y director general de General Motors de México, entre otros, se iniciaron formalmente las operaciones de esta planta que viene a sumarse a las instalaciones que GM tiene en Toluca, Silao y Ramos Arizpe. 

Las instalaciones de General Motors en San Luis Potosí están preparadas para producir, en una primera fase, hasta 30 unidades por hora, tanto para el mercado nacional como el de exportación, y producirá el nuevo Chevrolet Aveo. 
Ante consultas locales, desde General Motors confirmaron que “está en estudio” el traer el Aveo a la Argentina. “No hay fechas porque justamente está en análisis”, deslizaron desde las oficinas del edificio Consultatio. 
Es que definitivamente, la oferta de la compañía en el segmento de los chicos- medianos requiere un “sentarse a estudiar”. Porque el Aveo se sumaría a un equipo hoy integrado por el Corsa Classic, Corsa II, en el medio el Astra y un poco más arriba el Vectra. Pero a todos ellos se sumará lo que resulte del proyecto Viva… 
Uno de los aspectos por los que se destaca el Aveo (una suerte de restyling del Corsa II a nivel estético) es su longitud. Pese a ser un vehículo del segmento B, este nuevo modelo alcanza los 4,31m de longitud, 1,71 de ancho y 1,51 de alto y el baúl de 400 litros de capacidad.

ENTRA MEXICO, SALE CHILE
En el mapa mundial de plantas de GM hay movimientos. Es que producto de la “falta de competitividad”, en Chile, la firma cerró el miércoles 30 sus instalaciones fabriles trasandinas. La empresa, que hasta ahora era la única que opera con una planta de armado de vehículos en el país vecino, produjo 300.000 unidades desde que se puso en marcha en 1974.
Los trabajadores armaron el 29 de julio la última camioneta Chevrolet D Max chilena, de un total de 24.000 que se produjeron en los últimos meses. Entonando el himno de Arica, el que fue acompañado de aplausos y sirenas, los operarios de General Motors despidieron el último vehículo que se fabricó en la planta, en la que trabajaron varias generaciones de familias ariqueñas.
El presidente del sindicato de la planta, Jorge Mollo, dijo que el cierre de la empresa "es el fin de una era".
La planta de Arica vivió su apogeo con el éxito del modelo Chevrolet LUV, entre 1982 y 2005, mientras en 2007, su sucesora, la D Max, logró un récord de ventas por 142 millones de dólares en envíos a diez países, según datos de la empresa.
Pero, la difícil competencia por la progresiva rebaja de aranceles a los vehículos extranjeros en el país, detonaron el cierre de la histórica planta de Arica.

A LA BAJA
General Motors (GM) perdió 15.500 millones en el segundo trimestre del año y sumó así cuatro trimestres consecutivos con resultados negativos. El volumen de negocios se retrajo 18% hasta los 38.200 millones de dólares, respecto del mismo período de 2007, por la crisis en el mercado del automóvil en Estados Unidos.

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