Con el objetivo de contribuir al cuidado del medioambiente, terminar con la problemática de los neumáticos usados y reactivar actividades paralelas, la Cámara del Neumático en conjunto con el Ceamse, INTI y Regomax pusieron en marcha la primera planta de reciclado de neumáticos en la Argentina.
La planta demandó un desembolso de aproximadamente u$s2 millones y está ubicada en la localidad San Martín. En el marco de la presentación del programa “Por una conducción más ecológica” de Bridgestone Argentina, el titular de la multinacional fabricante y de la Cámara del Neumático aprovechó el encuentro para detallar esta nueva iniciativa.
“Hay 40.000 toneladas de neumáticos en Capital y GBA que son los centros donde se concentra el mayor parque automotor. La problemática de los neumáticos usados es muy grande y es un pasivo ambiental grave del que no se tenía una solución”, señaló Daniel Benvenutti, presidente de la Cámara del Neumático y de Bridgestone Argentina.
Los neumáticos que se estiman demoran 600 años en degradarse, se reciben en centros de transferencia y de allí se trasladan a la planta ubicada en el complejo III de Ceamse donde se separan los elementos del neumático usado (80% caucho, 15% acero y 5% nylon).
“Es una gestión sustentable responsable y había que encontrar una salida e involucra a toda la cadena de valor”, dijo Benvenutti. En este tren, dentro del proceso participa la empresa Regomax que está en Camino de Cintura y tritura el sobrante que es utilizado en el desarrollo de diversos productos como pisos plásticos para canchas de futbol, por ejemplo o pasto sintetico como el que se esta utilizando en la cancha en la que las Leona quieren quedarse con el Mundial de Hockey en Rosario.
Además el insumo se puede utilizar como combustible o incorporarlo en el asfalto. “Empezó a funcionar hace dos meses pero ahora está a pleno régimen”, indicó Benvenutti quien además agregó que recientemente sumaron una nueva trituradora para neumáticos para camión.
Comienza con una primera etapa donde los neumáticos son trozados en un triturador primario, obteniéndose un material que puede ser utilizado como combustible complementario y alternativo en hornos de cemento o usinas de generación eléctrica, reduciendo el consumo de gas natural.
La segunda etapa consiste en la trituración secundaria, separación del refuerzo textil / metálico y molienda fina de los neumáticos.
El procedimiento hace posible que el material obtenido se reutilice en diversos ámbitos, como por ejemplo, en la fabricación de pisos deportivos para canchas de futbol y pistas de atletismo, o su incorporación en asfaltos para mejorar la calidad de rodamiento, reducir el impacto sonoro del tránsito vehicular y ahorrar en mantenimiento de la cinta asfáltica.
El reciclado evita que cada año aproximadamente 40.000 toneladas de neumáticos se acumulen en basurales y espacios inadecuados, y permite transformar residuos de lenta degradación en productos de mayor valor agregado.